Las influencias de Cézanne y de Matisse, evidentes en distintos aspectos de su obra, lo vinculan con la modernidad asimilada en sus estadías parisinas.
VÍCTOR PISSARRO (Buenos Aires, Argentina, 1891-1937)
A los 16 años se recibe de maestro y profesor de música, disciplina en la que es discípulo de Alberto Williams. Ejerce el magisterio y da clases de música en la escuela primaria. Integra la Comisión Consultiva de Orientación Artística de la Dirección General de Escultura de la Provincia de Buenos Aires.
Hacia 1919 comienza su práctica pictórica. Es uno de los integrantes de la agrupación El Bermellón que funciona en el barrio La Boca, aproximadamente entre 1919 y 1923, junto a Juan Del Prete, Orlando Stagnaro, Víctor Cunsolo y José Luis Menghi, entre otros.
Desde 1925 realiza nueve viajes a Europa recorriendo distintos centros artísticos. Se vincula a los jóvenes argentinos con los que conformará el grupo de París. Paralelamente a su actividad pictórica da diversos conciertos de piano en Buenos Aires, Madrid y París. En esta última ciudad frecuenta el taller que Horacio Butler, donde pinta varios desnudos. En 1928 regresan juntos a Buenos Aires para organizar la muestra de artistas argentinos residentes en París que se presenta en Amigos del Arte. En 1929 acompaña desde Buenos Aires a su amigo Juan Del Prete en su primer viaje a Europa y llegan juntos a Berlín.
Concurre a los Salones Nacionales desde 1919 y se presenta en los del interior del país con regularidad. En 1926 participa en la Exposición de Artistas Argentinos en París y en 1928 se presenta en la Galería Carmine de esa ciudad. En Buenos Aires realiza muestras individuales en la Asociación Amigos del Arte en 1926 y 1929, en Boliche de Arte en 1927, en 1930 en la sala de la Asociación Wagneriana –invitado por Alfredo Guttero– y en 1934 en la Galería Müller.
En 1930 obtiene el Segundo Premio del Salón de Arte de Rosario. En el Salón Nacional es distinguido con un premio estímulo en 1935 por el Retrato de Clelia Pissarro y el Premio «Cecilia Grierson» en 1936. Este último lo gana con la obra Retrato de niña, actualmente en el Museo Eduardo Sívori.
Fallece en Buenos Aires el 22 de diciembre de 1937.
En 1938 se organiza una exhibición póstuma en su homenaje en la Asociación Amigos del Arte de Buenos Aires.
Pissarro trabaja la figura, mayormente la femenina, paisajes, naturalezas muertas y retratos, dejando numerosos dibujos, aguadas, acuarelas y óleos.
La síntesis del dibujo, la libertad de la pincelada, la transparencia y la diafanidad del color, tornan su obra fresca y etérea, a la vez que intensamente expresiva. Las influencias de Cézanne y de Matisse, evidentes en distintos aspectos de su obra, lo vinculan con la modernidad asimilada en sus estadías parisinas.
Sus obras integran la colección del Museo Nacional de Bellas Artes, Museo Eduardo Sívori, Museo Escolar Fernando Fader en Buenos Aires y los Museos Provinciales de Bellas Artes de La Plata, Córdoba, San Juan y Santa Fe, Museo Juan B. Castagnino de Rosario, del complejo Museo Pío Collivadino de Banfield-Museo Americanista de Lomas de Zamora (Provincia de Buenos Aires), además de figurar en importantes colecciones privadas.