“La obra de arte sirve como reflexión histórica“

La obra de Beatriz González, considerada una de las figuras más influyentes de la escena artística colombiana, ocupa un lugar único dentro de la historia del arte latinoamericano, no solo como pionera del arte pop. La obra de González se articula en torno a la cuestión de la memoria, pero sin recurrir a ésta como una coartada nostálgica, todo lo contrario, su trabajo está estrechamente ligado al presente. Su obra se inspira en los medios de masas que pone en diálogo con las narrativas populares y la pintura formal; o se apropia de fotografías reproducidas en prensa para reinterpretarlas mediante el dibujo, la pintura, la gráfica y la escultura. Además de su dilatada carrera artística, González ha desarrollado en paralelo una importante labor tanto curatorial como de índole teórica y pedagógica. A través de los proyectos expositivos y de investigación que ha impulsado, la artista ha ejercido una notable influencia en un gran número de artistas, críticos y curadores colombianos, haciéndoles tomar conciencia de la necesidad de concebir el museo y la exposición como un espacio de transmisión de conocimiento (no como un mero lugar de exhibición), y de ver al público como un interlocutor activo con el que hay que establecer un diálogo lo más directo y abierto posible.