Arshile Gorky es el eslabón que enlaza los surrealistas europeos con los expresionistas norteamericanos.
ARSHILE GORKY (Armenia, 1904 – EU, 1948)
La tragedia domina sus primeros años de vida: el genocidio de que fueron víctimas los armenios por parte de los turcos, durante la Primera Guerra Mundial, que tuvo como consecuencia que su padre se exiliase en Estados Unidos y que él, su madre y su hermana tuvieran que huir de las tropas turcas a pie, lo que acabó con la vida de su madre por cansancio y malnutrición en 1919. Al año siguiente consigue emigrar a los Estados Unidos.
Gorky en su proceso creativo hace un recorrido por los principales artistas de vanguardia incorporándolos a su propia obra, para arrancar del irracionalismo del surrealismo en su vertiente más abstracta en espacios abiertos y con estructuras biomórficas que flotan en ellos. Inventa un vocabulario de signos y una iconografía regida por nuevas, extrañas y peculiares leyes sintácticas.  Aunque es esencialmente autodidacta, asiste a la New School of Design de Boston, entre 1922 y 1924, y en 1926, enseña pintura el el Grand Central School of Art.
Arshile Gorky es el eslabón que enlaza los surrealistas europeos con los expresionistas norteamericanos. Su obra inicial refleja la influencia de Pablo Picasso, Cézanne y Braque. Para 1930 entra en contacto con artistas como Stuart Davis y De Kooning, con ese grupo de creativos de vanguardia expuso y se integró al núcleo del expresionismo abstracto. Su primera exposición individual llega en 1931 en la Mellon Gallery de Filadelfia. Por la misma época compartió estudio con De Kooning y trabajó para el WPA Federal Art Project en pinturas para el aeropuerto de Newark. Después de 1939, se siente más identificado con los surrealistas europeos y la obra abstracta de Wassily Kandinsky y Joan Miró.
Sus pinturas encierran formas de aspecto orgánico, manchas biomórficas que, repartidas por toda la tela, reflejan su interés por la asociación libre entre línea y color en una aparente arbitrariedad que no es tal, sujeta como está a la construcción de arquitecturas perfectamente equilibradas. Siendo abstractas, sus composiciones evocan realidades específicas; la línea crea formas que sugieren visiones fantásticas, mientras el color afirma el carácter plano de esas formas y la falta de referencialidad y, sin embargo, sus pinturas tienen cierto aire onírico que recuerda algunas composiciones de Miró o Roberto Matta.

Arshile Gorky se suicidó en 1948 después de una operación de cáncer, de sufrir un accidente de coche en el que se rompió el cuello y sufrir el estudio de su estudio.