Oswaldo Guayasamín
“… Guayasamín, fue un hombre de convicción latinoamericana y luchador por la democracia. Su obra refleja su profundo compromiso con el progreso social y con los pueblos marginados y explotados. América pierde a uno de los hombres más destacados en el mundo del arte, pero también a uno de los más solidarios y humanistas que ha dado nuestra América en toda su historia. No hay palabra para expresar los sentimientos y los recuerdos que guardo y guardaré de este hombre que ha dado lo mejor de sí por nuestros pueblos. Su memoria permanecerá en nosotros y será aliento permanente para quienes buscamos un mejor futuro para la humanidad…” Rigoberta Menchú Tum, Premio Nóbel de la Paz
Oswaldo Guayasamín (Quito, 6 de julio de 1919 – Baltimore, 10 de marzo de 1999). fue un artista ecuatoriano cuyo trabajo se caracteriza por su representación expresionista al estilo latinoamericano. El artista se centró especialmente en retratar la opresión desenfrenada, la pobreza y la lucha política que presenció durante su crecimiento. Nació el 6 de julio de 1919 en Quito, Ecuador, de padres descendientes de los Quechuas. Guayasamín mostró una pasión por el arte desde temprana edad y asistió a la Escuela de Bellas Artes de Quito. El posterior ascenso del artista a la fama se produjo con su exposición en el Salón Nacional de Acuarelistas y Dibujantes en 1948. Seguido de espectáculos en la Bienal de São Paulo, el Palacio de Luxemburgo en París y el Palais de Glace en Buenos Aires. Guayasamín es considerado por algunos como un héroe nacional, su legado incluye la finalización de La Capilla del Hombre, una capilla que recuerda el maltrato de los pueblos indígenas en América Latina. Durante su vida, Guayasamín se hizo amigo de los famosos escritores Gabriel García Márquez y Pablo Neruda. El artista murió el 10 de marzo de 1999 en Baltimore. Una vez dijo «Mantengan encendida una luz que siempre voy a volver», o «Mantenga una luz encendida porque siempre volveré».
Sus murales se pueden ver en la ciudad de Quito, dígase en el Palacio de Gobierno y en la sede del órgano legislativo, en la Universidad Central; en la sede de la UNESCO en París; en el aeropuerto Adolfo Suárez de Madrid y el Centro Simón Bolívar en la ciudad de Caracas.
Resumen de sus principales obras:
1. Huacayñan: consiste en la primera gran serie pictórica o por etapas del artista ecuatoriano. Esta palabra proviene del idioma Kiwcha y significa el camino del llanto y forma parte de un conjunto de cuadros pintados por Guayasamín, 103 en total, al transitar por diferentes partes del continente americano.
2. La Edad de la Ira: representa la segunda serie pictórica o etapa, cuya temática está basada en la violencia y en las guerras, en otras palabras lo que el ser humano es capaz de hacer contra de su propia especie.
3. Mientras vivo siempre te recuerdo: resulta ser la tercera serie o etapa, denominada también la Edad de la Ternura. Esta serie de pinturas el creador y artista ecuatoriano se la dedicó a su madre y a todas las madres en general. En los cuadros puede apreciarse la utilización de colores más vivos, lo cuales representan al amor y a la ternura entre las madres y los hijos, y la inocencia que caracteriza a cada niño.
Respecto a la calificación de su obra se puede afirmar que esta se caracteriza por su marcado carácter humanista, también ha sido señalada como expresionista, donde el autor llegó a plasmar manifestaciones intensas sobre el dolor y la violencia que le ha tocado vivir al ser humano durante el Siglo XX.
Fundación Guayasamín:
Esta Fundación fue creada por el pintor ecuatoriano de manera conjunta con su familia. Dicha institución constituye un organismo que tiene como fin fomentar la preservación de los bienes culturales y las colecciones que le pertenecían a Guayasamín. Esta preservación implica a la vez que se alcance un beneficio colectivo y un carácter popular, ante la firme creencia del pintor donde defendía que el patrimonio cultural debía pertenecer a los pueblos.
La Fundación entre sus funciones contempla la administración y la gestión de las obras que fueron donadas por Oswaldo Guayasamín y que ahora pertenecen al patrimonio artístico y cultural del Ecuador. Esta organización posee dos extensiones en su funcionamiento que radican en otros países, la primera es la Casa Museo Guayasamín de Cáceres en España y la Casa Museo Guayasamín de la Habana en Cuba.
BIOGRAFÍA
OSWALDO GUAYASAMÍN CALERO (Quito, Ecuador, 1919 - Baltimore, Maryland, Estados Unidos, 1999)
Pintor. Nació en Quito, Ecuador. Su padre, José Miguel Guayasamín, era un indígena quechua, dedicado al arte de la carpintería y su madre era una mujer mestiza. Desde pequeño fue muy observador y curioso aprendió fácilmente la carpintería pero su pasión era el dibujo y la pintura. Inteligentemente comenzó a vender sus pequeñas obras a los turistas para pagar sus estudios. Cuando termino la secundaria se matriculó, contra la voluntad de su padre, en la Escuela de Bellas Artes de Quito, donde recibió el título de Pintor y Escultor en 1941, recibió un reconocimiento como el mejor alumno de su promoción.
Guayasamín comenzó a mejorar sus obras de caricaturas, realizó varias caricaturas de sus profesores y compañeros que causaron gran sensación. Aprovechó la tienda de su madre para vender sus dibujos, también vendió algunos cuadros sobre lienzo y cartón, con paisajes y retratos de estrellas de cine, en la Plaza de la Independencia. Tuvo que afrontar mientras estudiaba en la Escuela la “guerra de los cuatro días”, un levantamiento cívico militar contra Neptalí Bonifaz, donde murió su gran amigo Manjarrés.
Esta situación fue inspiración para la creación de su obra “Los niños muertos”, marca su visión de la gente y de la sociedad. También estudió arquitectura. A los 21 años tuvo su primera exposición en una sala particular de Quito y provoca gran polémica. La crítica consideró esta muestra como un enfrentamiento con la exposición oficial de la Escuela de Bellas Artes. Pero no todo fue negativo, entre los espectadores estaba Nelson Rockefeller, que quedó impresionado por la obra, y le compró varios cuadros, además de ayudarlo para su futuro.
Emprendió un viaje desde 1942 hasta 1943 a Estados Unidos. Luego, viajó a México, en donde tuvo el honor de conocer al maestro muralista Orozco, de quien se hace asistente. En este periodo había un boom de la corriente artística indigenista. Como consecuencia, las obras iniciales de Guayasamín van a exponer dicha corriente. Todas sus obras de tipo indigenista expresaron una marcada denuncia social. Su recorrido por Norteamérica, y sus grandes museos, fue muy importante para estudiar las obras de importantes maestros como Goya y El Greco.
A comienzos de la década de 1940 trabó amistad con Pablo Neruda y realizó un largo viaje por países de América: Chile, Perú, Argentina, Bolivia y Uruguay, durante el cual tomó apuntes para su gran serie El camino del llanto, compuesta por más de cien telas que giran en torno a la temática del indígena, el negro y el mestizo en América. Su compatriota Benjamín Carrión le brindó gran apoyo desde la recién fundada Casa de la Cultura de Quito, en donde expuso la serie en 1952. Luego estuvo en el Museo de Arte Colonial de Quito y, a lo largo del mismo año, en la Unión Panamericana de Washington y en la III Bienal Hispanoamericana de Arte, realizada en la ciudad española de Barcelona.
En España fue ganador del Gran Premio de Pintura. Guayasamín fue admirado por su mezcla de la temática indígena con las tendencias de las vanguardias de principios de siglo, concretamente el cubismo y el expresionismo, elementos que se advierten en el mural en mosaico de cristal veneciano denominado Homenaje al Hombre Americano, realizado en 1954 para el Centro Simón Bolívar de la ciudad de Caracas, Venezuela. Ahora bien, en 1957 recibió el Premio Mejor Pintor de Sudamérica, concedido por la Bienal de São Paulo, Brasil.
Durante 1958 realizó dos importantes murales en el Ecuador: El descubrimiento del Río Amazonas, realizado en mosaico veneciano, actualmente lo podemos observar en el Palacio de Gobierno de Quito, y el mural Historia del Hombre y la Cultura, realizad por encargo de la Facultad de Jurisprudencia de la Universidad Central del Ecuador. Para el momento en que fue ganador del Gran Premio del Salón de Honor de la II Bienal de Pintura, Escultura y Grabado de México, su carrera empezó a proyectarse internacionalmente.
Luego de algunos años de trabajo fuerte, presentó en el Museo de Bellas Artes de la Ciudad de México su segunda serie de envergadura, bajo el título La edad de la ira y compuesta por 260 obras que se agrupan por series, en las que el pintor acumuló diversos elementos de su experiencia vital para modelar en una deslumbrante sucesión de telas el drama y la tragedia del hombre de aquella época. Esta obra ha sido catalogada como una de las últimas grandes realizaciones del cartel político en pintura del siglo XX. Fue presentada en 1973, en el Palacio de la Virreina (Barcelona), en las Galerías Nacionales de Praga y en el Museo de Arte Moderno de París.
Durante ese periodo se dedicó a la realización de La Patria Joven, que se encuentra en la ciudad de Guayaquil. Posteriormente, el Museo de Arte Contemporáneo de Madrid amparó una muestra de sus últimas obras. Por su importante labor fue nombrado vicepresidente, y luego presidente, de la Casa de la Cultura de Quito, en este cargo ejecutó un amplio programa de difusión cultural. Guayasamín fue el primer artista latinoamericano en ser condecorado por el gobierno de Francia en 1974.
Durante el año 1977, el Ministerio de Relaciones Exteriores organizó en Quito una retrospectiva de su obra, parte de la cual se expuso simultáneamente en varias ciudades de España. Tres años después inauguró su mural Ecuador en el Consejo Provincial de Pichincha y, también culminó el mural, denominado España-Hispanoamérica, que se encuentra en el Aeropuerto Internacional de Barajas, en Madrid. Su obra ha sido reconocida como de carácter trascendental, por ello, el gobierno ecuatoriano apoyó la creación de la Fundación Guayasamín, patrimonio cultural del país.
Oswaldo Guayasamín decidió donar como agradecimiento una gran cantidad de sus obras y colecciones de arte. Las obras de este ecuatoriano con raíces indígenas es su constante denuncia social, en los que rechaza con convicción los horrores, los desastres y los dramas del hombre, dando a sus obras una expresividad particular dentro de la escuela indigenista. Lamentablemente su vida terminó el 10 de marzo de 1999, su país le realizó sentidos homenajes y reconoció su obra y su aporte al arte de Latinoamérica.