MARIO GRANDI (Argentina, 1918 – 1971)
Fue ilustrador y grabador, hizo cerámica y cartones para tapices. Pintó óleos, témperas, acuarelas, y consagró al pastel gran parte de su obra. Esta difícil técnica, preferida por Fantin-Latour, Degas y Renoir, tuvo en Grandi a un maestro indiscutido. Hijo de un inmigrante italiano y una criolla cordobesa, Mario Darío Grandi nació en Buenos Aires, el 28 de octubre de 1918. Fue un pintor autodidacta aunque por un tiempo asistió a las clases que Lino Spilimbergo impartía en el Instituto Argentino de Artes Gráficas y concurrió también a cursos en la Sociedad de Estímulo a las Bellas Artes de Buenos Aires. Residió durante más de diez años en Córdoba y en 1941 realizó su primera exposición en el Teatro del Pueblo. La pintura de este periodo tiene formas estilizadas y recuerdan a Modigliani y también a Raúl Soldi. En 1954 recibió el primer premio en el Salón Nacional de Bellas Artes. Expuso en Buenos Aires y en el interior del país y algunos de sus trabajos representaron a la Argentina en las Bienales de Méjico (1951), y San Pablo (1957) y en la Exposición de Arte Sacro de Roma (1961). Falleció en la misma ciudad el 28 de abril de 1971.