PIO COLLIVADINO (Buenos Aires, Argentina, 1869 – 1945)
Fue integrante del grupo Nexus junto a celebridades de la plástica argentina como Fernando Fader, Carlos Ripamonte y Cesáreo Bernaldo de Quirós, más allá de su versatilidad como artista multifacético, se ha destacado como un pintor de estirpe. El realizar sus obras al aire libre lo convirtió en el primer paisajista urbano, al reflejar en sus lienzos con una estética puntillista en las calles y la cotidianeidad de Buenos Aires en el siglo XIX y XX, con una impronta de las vanguardias europeas amalgamada a la ciudad porteña.
Hijo de familia lombrada nació en Barracas en 1869, sus inicios en la preparación artística ha sido en la Societá Nazionale de Buenos Aires en el taller del pintor decorador Luis Luzzi. En 1889 ingresa en la Academia de Bellas Artes de Roma donde estudió la técnica del fresco con el maestro César Mariani. Dejó su huella en la realización de los frescos del Palacio de Justicia de Roma. Asimismo, Se interesó en las escenografías de los carnavales y otros festejos populares de Roma y Venecia, algo que arrastraba desde su adolescencia, la pasión por el teatro, especialmente en la pintura circense y la escenografía. Esto motivó que a su regreso a Buenos Aires fundara la Escuela de Artes Decorativas y la Escuela de Escenografía del Teatro Colón.
En 1900 visitó la Exposición Universal de París, la pintura moderna francesa fue lo que motivó su fascinación, y a partir de ese momento comienza a dar señales del posmodernismo y a desprenderse del arte italiano, del cual estaba muy influenciado. Este cambio se ve reflejado en su famoso cuadro La hora del almuerzo, enviado en 1903 a la Bienal de Venecia.
En 1905 fue honrado con la Orden de la Corona de Italia, convirtiéndose en miembro honorario de la Academia de Brera, en Milán. Tuvo gran preponderancia en la enseñanza del grabado al aguafuerte, técnica que luego fue utilizada por el Grupo Barracas. Como discípulos del pestigioso artista, se puede mencionar: Lino Spilimbergo, Miguel Victorica, Raquel Forner, Héctor Basaldúa y Benito Quinquela Martín, entre otros. En 1907 regresa a la Argentina y al año siguiente es nombrado Director de la Academia Nacional de Bellas Artes, cargo que ocuparía por 35 años. Fallece en 1945 a los 76 años, en Buenos Aires.